Protocolos para el uso del SEM en diversas situaciones

1. Rendimiento deportivo mejorado y entrenamiento de fuerza

Ejemplo: Atletas que utilizan EMS durante el entrenamiento de fuerza para aumentar el reclutamiento muscular y mejorar la eficiencia del entrenamiento.

 

Cómo funciona: La EMS estimula la contracción muscular evitando el cerebro y dirigiéndose directamente al músculo. Esto puede activar fibras musculares que normalmente son más difíciles de activar mediante contracciones voluntarias únicamente. Los atletas de alto nivel incorporan la EMS a sus rutinas habituales para trabajar las fibras musculares de contracción rápida, esenciales para la velocidad y la potencia.

 

Plan:

Combine EMS con ejercicios de fuerza tradicionales, como sentadillas, estocadas o flexiones.

Sesión de ejemplo: utilice la estimulación EMS durante un entrenamiento de la parte inferior del cuerpo de 30 minutos para aumentar la activación en los cuádriceps, los isquiotibiales y los glúteos.

Frecuencia: 2-3 veces por semana, integrado con el entrenamiento normal.

Beneficio: Aumenta la activación muscular, mejora la potencia explosiva y reduce la fatiga durante sesiones de entrenamiento intenso.

 

2. Recuperación post-entrenamiento

Ejemplo: utilizar EMS para mejorar la recuperación muscular después de sesiones de entrenamiento intensas.

 

Cómo funciona: Después del ejercicio, la EMS a baja frecuencia puede estimular la circulación y promover la eliminación de ácido láctico y otros subproductos metabólicos, reduciendo así las agujetas (DOMS). Esta técnica acelera la recuperación al mejorar el flujo sanguíneo y promover el proceso de curación.

 

Plan:

Aplicar EMS a bajas frecuencias (alrededor de 5-10 Hz) sobre músculos doloridos o fatigados.

Ejemplo: Recuperación después de correr: aplicar EMS en las pantorrillas y los muslos durante 15 a 20 minutos después de correr una larga distancia.

Frecuencia: Después de cada sesión de entrenamiento intenso o 3-4 veces por semana.

Beneficio: Recuperación más rápida, reducción del dolor muscular y mejor rendimiento en las sesiones de entrenamiento posteriores.

 

3. Escultura corporal y reducción de grasa

Ejemplo: EMS aplicado para tratar áreas de grasa persistente (por ejemplo, abdominales, muslos, brazos) junto con una dieta adecuada y un programa de ejercicios.

 

Cómo funciona: La EMS puede mejorar la circulación sanguínea local y estimular las contracciones musculares en zonas problemáticas, lo que podría favorecer el metabolismo de las grasas y tonificar los músculos. Si bien la EMS por sí sola no produce una pérdida significativa de grasa, combinada con ejercicio y un déficit calórico, puede contribuir a la definición y firmeza muscular.

 

Plan:

Utilice un dispositivo EMS diseñado específicamente para esculpir el cuerpo (a menudo comercializados como “estimuladores abdominales” o “cinturones tonificadores”).

Ejemplo: Aplicar EMS en la zona abdominal durante 20 a 30 minutos diariamente mientras se sigue un régimen de entrenamiento en intervalos de alta intensidad (HIIT).

Frecuencia: Uso diario durante 4-6 semanas para obtener resultados notables.

Beneficio: Músculos tonificados, definición mejorada y potencialmente mayor pérdida de grasa cuando se combina con ejercicio y una dieta saludable.

 

4. Alivio del dolor crónico y rehabilitación

Ejemplo: EMS aplicado para controlar el dolor crónico en pacientes con afecciones como artritis o dolor lumbar.

 

Cómo funciona: La EMS envía pequeños impulsos eléctricos a los músculos y nervios afectados, lo que ayuda a interrumpir las señales de dolor enviadas al cerebro. Además, puede estimular la actividad muscular en zonas debilitadas o atrofiadas debido a una lesión o enfermedad.

 

Plan:

Utilice un dispositivo EMS configurado en modos de pulso de baja frecuencia diseñado para aliviar el dolor.

Ejemplo: Para el dolor lumbar, aplique parches EMS en la zona lumbar durante 20 a 30 minutos dos veces al día.

Frecuencia: Diariamente o según sea necesario para el manejo del dolor.

Beneficio: Reduce la intensidad del dolor crónico, mejora la movilidad y previene una mayor degeneración muscular.

 

5. Corrección de la postura

Ejemplo: EMS se utiliza para estimular y reentrenar los músculos posturales débiles, especialmente en trabajadores de oficina que pasan muchas horas sentados.

Cómo funciona: La EMS ayuda a activar músculos poco utilizados, como los de la parte superior de la espalda o el torso, que suelen debilitarse debido a una mala postura. Esto puede ayudar a mejorar la alineación y reducir la tensión causada por estar sentado en malas posiciones durante largos periodos.

 

Plan:

Utilice EMS para trabajar los músculos de la parte superior de la espalda y el centro del cuerpo mientras practica ejercicios de corrección de la postura.

Ejemplo: Aplicar parches EMS en los músculos de la parte superior de la espalda (por ejemplo, trapecios y romboides) durante 15 a 20 minutos dos veces al día, combinados con ejercicios de estiramiento y fortalecimiento como extensiones de espalda y planchas.

Frecuencia: 3-4 veces por semana para apoyar mejoras de la postura a largo plazo.

Beneficio: Mejora la postura, reduce el dolor de espalda y previene desequilibrios musculoesqueléticos.

 

6. Tonificación muscular facial y antienvejecimiento

Ejemplo: EMS aplicado a los músculos faciales para estimular las contracciones micromusculares, a menudo utilizado en tratamientos de belleza para reducir las arrugas y tensar la piel.

 

Cómo funciona: La EMS de baja intensidad puede estimular los músculos faciales pequeños, mejorando la circulación y el tono muscular, lo que ayuda a tensar la piel y reducir los signos del envejecimiento. Se ofrece comúnmente en clínicas de belleza como parte de los tratamientos antienvejecimiento.

 

Plan:

Utilice un dispositivo facial EMS especializado diseñado para tonificar la piel y antienvejecimiento.

Ejemplo: Aplique el dispositivo en áreas específicas como las mejillas, la frente y la mandíbula durante 10 a 15 minutos por sesión.

Frecuencia: 3-5 sesiones por semana durante 4-6 semanas para ver resultados visibles.

Beneficio: Piel más tersa y de aspecto más juvenil y reducción de líneas finas y arrugas.

 

7. Rehabilitación después de una lesión o cirugía

Ejemplo: EMS como parte de la rehabilitación para volver a entrenar los músculos después de una cirugía o lesión (por ejemplo, cirugía de rodilla o recuperación de un accidente cerebrovascular).

 

Cómo funciona: En caso de atrofia muscular o daño nervioso, la EMS puede ayudar a reactivar los músculos debilitados. Se utiliza a menudo en fisioterapia para ayudar a recuperar la fuerza y ​​la funcionalidad sin sobrecargar las zonas lesionadas.

 

Plan:

Utilice EMS bajo la guía de un fisioterapeuta para garantizar la aplicación e intensidad adecuadas.

Ejemplo: Después de una cirugía de rodilla, aplique EMS en los cuádriceps y los isquiotibiales para ayudar a recuperar la fuerza y ​​mejorar la movilidad.

Frecuencia: Sesiones diarias, con aumento progresivo de la intensidad a medida que avanza la recuperación.

Beneficio: Recuperación muscular más rápida, mayor fuerza y ​​reducción de la atrofia muscular durante la rehabilitación.

 

Conclusión:

La tecnología EMS continúa evolucionando, ofreciendo nuevas maneras de mejorar la condición física, la salud, la recuperación y las rutinas de belleza. Estos ejemplos específicos muestran cómo la EMS puede integrarse en diversas situaciones para obtener resultados óptimos. Ya sea utilizada por atletas para mejorar su rendimiento, por personas que buscan aliviar el dolor o por quienes buscan mejorar el tono muscular y la estética corporal, la EMS ofrece una herramienta versátil y eficaz.


Hora de publicación: 04-abr-2025