El dispositivo que se muestra en la figura es el R-C4A. Seleccione el modo EMS y elija pierna o cadera. Ajuste la intensidad de los dos modos de canal antes de comenzar su sesión de entrenamiento. Comience realizando ejercicios de flexión y extensión de rodilla. Cuando sienta que se libera la corriente, puede aplicar fuerza contra el grupo muscular o en la dirección de la contracción muscular. Descanse cuando se sienta agotado y repita estos movimientos de entrenamiento hasta terminar.

1. Colocación de electrodos
Identificación de grupos musculares: concéntrese en los cuádriceps, especialmente el vasto medial (parte interna del muslo) y el vasto lateral (parte externa del muslo).
Técnica de colocación:Utilice dos electrodos para cada grupo muscular, colocados paralelos a las fibras musculares.
Para el vasto medial: coloque un electrodo en el tercio superior del músculo y el otro en el tercio inferior.
Para el vasto lateral: de manera similar, coloque un electrodo en el tercio superior y otro en el tercio medio o inferior.
Preparación de la piel:Limpie la piel con toallitas con alcohol para reducir la impedancia y mejorar la adhesión de los electrodos. Asegúrese de que no haya vello en la zona de los electrodos para facilitar el contacto.
2. Elección de frecuencia y ancho de pulso
※ Frecuencia:
Para fortalecer los músculos, utilice 30-50 Hz.
Para la resistencia muscular, las frecuencias más bajas (10-20 Hz) pueden ser efectivas.
Ancho de pulso:
Para la estimulación muscular general, ajuste la duración del pulso entre 200 y 300 microsegundos. Una duración mayor puede provocar contracciones más intensas, pero también puede aumentar la incomodidad.
Ajuste de parámetros: Comience con el límite inferior del espectro de frecuencia y ancho de pulso. Aumente gradualmente según la tolerancia.

3. Protocolo de tratamiento
Duración de la sesión: intente durar entre 20 y 30 minutos por sesión.
Frecuencia de Sesiones: Realizar 2-3 sesiones por semana, asegurando un tiempo de recuperación adecuado entre sesiones.
Niveles de intensidad: Comience con una intensidad baja para evaluar la comodidad y luego aumente hasta lograr una contracción fuerte, pero tolerable. Los pacientes deben sentir una contracción muscular, pero no dolor.
4. Seguimiento y retroalimentación
Observar las reacciones: Esté atento a signos de fatiga o malestar muscular. El músculo debe sentirse cansado, pero no doloroso, al final de la sesión.
Ajustes: Si se presenta dolor o malestar excesivo, reduzca la intensidad o la frecuencia.
5. Integración de la rehabilitación
Combinación con otras terapias: utilice EMS como enfoque complementario junto con ejercicios de fisioterapia, estiramientos y entrenamiento funcional.
Participación del terapeuta: trabaje en estrecha colaboración con un fisioterapeuta para asegurarse de que el protocolo EMS se alinee con sus objetivos y progreso generales de rehabilitación.
6. Consejos generales
Mantente hidratado: bebe agua antes y después de las sesiones para apoyar la función muscular.
Descanso y recuperación: permita que los músculos se recuperen adecuadamente entre sesiones de EMS para evitar el sobreentrenamiento.
7. Consideraciones de seguridad
Contraindicaciones: Evite utilizar EMS si tiene algún dispositivo electrónico implantado, lesiones en la piel o cualquier contraindicación recomendada por un profesional de la salud.
Preparación para emergencias: sepa cómo apagar el dispositivo de forma segura en caso de malestar.
Siguiendo estas pautas, podrá utilizar EMS eficazmente para la rehabilitación del ligamento cruzado anterior (LCA), mejorando la recuperación y la fuerza muscular, a la vez que minimiza los riesgos. Priorice siempre la comunicación con los profesionales de la salud para adaptar el programa a sus necesidades individuales.
Hora de publicación: 08-oct-2024